Aceptamos la idea de belleza y reconocemos nuestra extraordinaria necesidad de poseer aquello que es hermoso. No estamos satisfechos de crear cosas que simplemente cumplan con su función. También éstas deben ser hermosas, a veces solamente hermosas.
Existen jardines de muy diversas formas creados muchas veces tan sólo desde éste punto de vista, la de ser hermosos. Sin embargo, para mucha gente la idea de la jardinería como arte es todavía desconcertante o completamente extraña.
(C. Th. Sørensen, 1963)
Existen un número de arquitectos paisajistas y jardineros que a lo largo de los años me han inspirado y me han servido de «mentores virtuales», bien por sus proyectos, o bien por sus ideas y labor de divulgación. C. Th. Sørensen fue un gran hallazgo, y sin duda alguna un personaje cautivador. Con él comienzo una serie dedicada a los maestros del paisaje.
Carl Theodor Sørensen (1893-1979) es probablemente uno de los grandes arquitectos paisajistas del siglo 20 y uno de los primeros modernistas dentro de la arquitectura del paisaje.
Sus obras se caracterizaban por la fusión del arte, funcionalidad y tradición (fue un gran estudioso de la historia de los jardines). Pero destaca su forma de transformar el paisaje agrícola y cultural en obras de arte arquitectónicas; y he aquí su gran contribución al jardín (y al paisaje) modernista.
Si el diseño es fuerte, el diseño puede sobrevivir y transformarse. Por lo tanto, es cierto que puede existir algo duradero en el paisaje cambiante. Ésta es la esencia de la belleza en un paisaje cultural.
(C. Th. Sørensen, 1963)
«Profundo humanista»
Sus obras a pesar del uso de rígidas formas geométricas (círculos, cuadrados, óvalos, espirales y formas libres) eran de una gran flexibilidad y funcionalidad en las que el hombre siempre era el origen.
Sørensen siempre insistió en que los jardines son una forma de hacer arte, sin olvidarse jamás de la importante labor social que estos han de ofrecer. Un arte a disposición y uso del público.
Un ejemplo del arte del jardín en su estado más puro es el Jardín Musical, concebido en 1945, y finalmente ejecutado en 1956 en el complejo industrial-cultural Angli IV en Herning (Dinamarca), donde Sørensen aplicó sus conocimientos, tras años de estudios sobre la historia del jardín y sus formas, creó este escultórico jardín, que todavía hoy sigue en pie.



Referencias:
Imagen destacada: Publicada en landscapetheory1.wordpress.com
1. Anne Whiston Spirn, «Introduction» C.Th. Sørensen: Havekunstner, by Sven-Ingvar Andersson and Steen Høyer. (Copenhagen: Arkitektens Forlag, 1993)
2. Marc Treib, The Architecture of Landscape 1940-1960 (Penn Univeristy of Pennsylvanis Press Philadelphia, 2002)
3. Peter Bosselmann, Landscape Architecture as Art: C. Th. Sørensen. A Humanist (Landscape Journal, 1998)